Elegir la escuela primaria adecuada para nuestros hijos es una decisión que va mucho más allá de la cercanía al hogar o de la disponibilidad de cupo. Se trata de encontrar un entorno donde nuestros pequeños puedan desarrollarse en todos los sentidos como aprender, convivir, construir confianza y encontrar inspiración para seguir creciendo. Queremos escuelas donde no solo se imparta conocimiento, sino donde se construyan cimientos sólidos para el futuro de nuestros hijos.
En el Estado de México, hay escuelas primarias públicas que han destacado notablemente por su desempeño, tanto académico como en la formación integral de sus estudiantes. Estas instituciones han sido reconocidas por diferentes indicadores educativos, incluyendo los resultados en evaluaciones nacionales como la prueba PLANEA, pero también por su infraestructura, organización interna, nivel de compromiso docente y ambiente escolar. Todo esto influye directamente en la experiencia educativa de los niños.
El rendimiento académico es uno de los elementos que más se toma en cuenta cuando se habla de calidad educativa. Y es que las evaluaciones ayudan a identificar qué escuelas logran mejores aprendizajes en áreas clave como Lenguaje y Matemáticas. Algunas primarias en municipios como Tlalnepantla y Nezahualcóyotl han logrado niveles sobresalientes en estas evaluaciones, lo que da una buena idea del trabajo constante que realizan día a día con sus estudiantes.
Pero también hay que hablar del ambiente escolar. Una escuela que se siente segura, limpia, organizada y con una comunidad comprometida es un espacio que permite que los niños se concentren en aprender y se sientan cómodos en su desarrollo diario. El acompañamiento que brindan los docentes y la apertura a la participación de madres y padres en actividades escolares también marcan una gran diferencia.
Otro aspecto fundamental tiene que ver con la infraestructura. Escuelas que cuentan con aulas bien iluminadas, áreas de recreo, sanitarios dignos y espacios adecuados para la enseñanza tienen una ventaja significativa. En algunos municipios del Estado de México se han destinado recursos públicos para renovar o rehabilitar planteles, como ocurrió con la Escuela Primaria “Profesor Carlos Hank González” en Metepec y la Escuela Primaria “General José Vicente Villada” en Toluca, donde se realizaron mejoras importantes que hoy impactan positivamente en la experiencia de aprendizaje de sus estudiantes.
Además, hay escuelas que han logrado formar redes de colaboración entre docentes, fortaleciendo así las estrategias de enseñanza. Esto ha permitido atender de forma más personalizada a cada estudiante, adaptándose a distintos ritmos de aprendizaje y ofreciendo apoyo a quienes lo necesitan sin que nadie se quede atrás.
Al hablar de primarias destacadas en el Estado de México, vale la pena mencionar que, aunque no hay un único modelo de excelencia, sí existen rasgos comunes entre las mejores escuelas como el trabajo en equipo, liderazgo pedagógico, comunicación efectiva entre personal docente y padres de familia, planeación adecuada, uso responsable de los recursos y una visión clara de hacia dónde quieren llevar a sus estudiantes.
Muchas de estas escuelas están ubicadas en zonas urbanas y semiurbanas, lo que demuestra que incluso en contextos con retos sociales importantes, es posible lograr una educación pública de calidad. Con frecuencia, estos logros no se deben a condiciones extraordinarias, sino al esfuerzo conjunto de docentes, directivos y familias comprometidas con la formación de los niños.
Dentro de este panorama, instituciones como la Escuela Primaria Benito Juárez en Tlalnepantla o la Prof. Simón Ramírez Rodríguez en Nezahualcóyotl han logrado convertirse en referencia por sus resultados educativos y el ambiente que ofrecen a sus alumnos. Lo mismo puede decirse de planteles como Ignacio Manuel Altamirano, Cuauhtémoc, Ford No. 169, Justo Sierra y muchas otras que han sido señaladas por especialistas como ejemplos a seguir.
Es importante también reconocer que muchas veces estas escuelas operan con recursos limitados, pero los aprovechan al máximo. En lugar de verse como una desventaja, esta situación ha impulsado la creatividad y el compromiso del personal educativo para generar condiciones de aprendizaje significativas. Cuando existe liderazgo escolar, motivación del equipo docente y participación de las familias, los recursos disponibles rinden mucho más.
Otro elemento que se observa con frecuencia en estas escuelas es la continuidad del personal docente. Cuando los maestros permanecen durante varios ciclos escolares, se genera un conocimiento profundo de las necesidades de los estudiantes y se facilita la construcción de estrategias que se mantienen en el tiempo. Esta estabilidad también da confianza a las familias y favorece un ambiente de colaboración.
Además del enfoque académico, varias escuelas han integrado actividades culturales, deportivas y artísticas como parte del currículo escolar. Estas iniciativas no solo enriquecen la formación de los niños, sino que también les permiten descubrir talentos, desarrollar habilidades sociales y reforzar su autoestima. Tener acceso a una educación integral es uno de los grandes valores que estas instituciones han promovido de forma constante.
Es probable que como padres o tutores nos preguntemos: “¿Cómo saber si una escuela primaria pública es buena?”. La respuesta no siempre está en un solo indicador. Lo ideal es pensar en los distintos factores, el trato que recibe cada estudiante, la claridad en la comunicación con los padres, la organización del plantel, la limpieza de las instalaciones, la motivación del personal docente y, sobre todo, los resultados de aprendizaje.
Por ello, muchas familias optan por visitar las escuelas, platicar con los docentes y conocer la forma en la que trabajan. Esta es una excelente estrategia para tener una visión más cercana y tomar decisiones informadas. La buena noticia es que en el Estado de México existen varias primarias públicas que cumplen con estos criterios y que han logrado destacarse, incluso en comparación con muchas instituciones privadas.
La educación primaria es una etapa fundamental que marcará la vida de nuestros hijos. Elegir una buena escuela, en la que puedan sentirse felices, seguros y motivados a aprender, es una inversión que va mucho más allá de lo económico. Esperamos que este artículo te haya ayudado a encontrar la mejor escuela para tu hijo (a).