En este artículo te vamos a explicar y ayudar a resolver problemas de suma y resta, algo que seguramente ya conoces un poquito, pero que aquí vamos a practicar para que te vuelvas un verdadero experto o experta. No te preocupes si algunas cosas te parecen nuevas, vamos a ir paso a paso y con ejemplos muy sencillos. Lo importante es que aprendas y te diviertas
Un problema es como una historia que nos da datos para pensar. A veces tenemos que juntar cosas (eso es una suma) o quitar cosas (eso es una resta). Lo más importante es leer bien el problema, entender de qué se trata, y luego decidir si hay que sumar o restar.
Lo primero y más importante es leer despacio, siempre debes fijarte qué dice y qué te están preguntando. A veces las palabras clave nos ayudan como por ejemplo, si ves “en total”, “juntos” o “cuántos hay ahora”, probablemente es una suma. Si dice “le quitaron”, “se fueron” o “quedan”, entonces lo mas probable es que se trate de una resta.
En seguida te explicaremos cómo se hace con algunos ejemplos sencillos:
Descarga Ejercicios de Sumas y Restas para imprimir en PDF
Sofía tiene 4 pelotas rojas y 3 pelotas azules. ¿Cuántas pelotas tiene en total?
Paso #1: ¿Qué sabemos? Que Sofía tiene 4 pelotas rojas y 3 pelotas azules.
Paso #2: ¿Qué nos preguntan? Cuántas tiene en total.
Paso #3: ¿Sumamos o restamos? SUMAMOS, porque queremos saber cuántas hay en total.
Paso #4: Hacemos la operación: 4 + 3 = 7
Sofía tiene 7 pelotas en total.
Ahora vamos a ver un ejemplo muy sencillo de una resta:
En una granja hay 10 gallinas. Si 4 se fueron al granero, ¿cuántas quedan en la granja?
Paso #1: Había 10 gallinas.
Paso #2: Se fueron 4.
Paso #3: ¿Qué queremos saber? Cuántas quedan.
Paso #4: ¿Sumamos o restamos? RESTAMOS, porque se fueron, entonces: 10 – 4 = 6
Quedan 6 gallinas en la granja.
Aquí van unos problemas para que los intentes resolver tú. Usa lápiz y papel si necesitas.
¿Ya los resolviste? ¡Vamos a ver las respuestas!
A veces el problema es un poquito más largo, pero no te asustes. Haz lo mismo: lee con calma, encuentra los datos importantes y decide si necesitas sumar o restar.
Después de hacer la suma o la resta, vuelve a leer el problema y piensa: ¿Lo que resolví tiene sentido?, ¿Mi número final es más grande o más pequeño, como debería?
Otro tip que te puede ayudar es pensar que si estás quitando cosas, y tu número final te salió más grande, ¡seguro algo salió mal! Entonces vuelve a revisar para así saber en que parte te equivocaste.
Cuando terminas de hacer un problema de matemáticas, es muy normal que te preguntes si lo hiciste bien. Una forma muy útil para comprobarlo es hacer la operación al revés. Por ejemplo, si sumaste 45 más 23 y obtuviste 68, puedes restar 23 a 68 y ver si el resultado es 45.
Si te da ese número, entonces hiciste bien la suma. Es como mirar tu trabajo con un espejo, si se ve igual de los dos lados, quiere decir que todo está correcto. Este pequeño truco te puede ayudar a revisar por ti mismo y a sentirte más seguro con tus respuestas.
También es muy divertido descubrir cosas curiosas sobre los números. Por ejemplo, ¿sabías que algunos números son pares y otros son impares? Los pares siempre terminan en los números 0, 2, 4, 6 u 8, mientras que los impares terminan en 1, 3, 5, 7 o 9.
Esto sirve mucho cuando necesitas repartir cosas entre amigos o cuando estás resolviendo acertijos con números. Y otra cosa interesante es que los números nunca se terminan. Siempre puedes sumar uno más, sin importar en qué número estés. Es como subir por una escalera que no tiene fin, siempre puedes seguir avanzando.
Si quieres mejorar en matemáticas y sentirte más cómodo resolviendo operaciones, lo más importante es practicar seguido. No necesitas hacerlo todo en un solo día, basta con que todos los días intentes una operación o resuelvas un pequeño problema. Una idea que ayuda mucho es decir en voz alta lo que estás haciendo mientras resuelves el problema.
Eso te ayuda a organizar tus ideas y entender mejor los pasos. Y si algo se te complica, puedes dibujar lo que estás imaginando. Por ejemplo, si necesitas repartir manzanas entre niños, puedes hacer un dibujo de las manzanas y de los niños para ver cuántas le tocan a cada uno. A veces los dibujos hacen que todo se entienda mejor.
No te preocupes si te equivocas, eso le pasa a todos, incluso a los adultos. Lo importante es ver qué fue lo que no salió bien y aprender de ese error. Así es como se mejora. Y si alguna vez algo no te queda claro, no tengas miedo de pedir ayuda. Puede ser a tu maestra, a tus papás o a alguien en casa que sepa del tema. Ellos pueden explicártelo de otra manera y ayudarte a entender. Recuerda que todos aprendemos a diferentes ritmos y lo importante es disfrutar el proceso y no rendirse.